Como en artículos anteriores continuamos haciendo referencia a la demografía que existe hoy en día en los países desarrollados y al gran número de personas que llegan a edades avanzadas. Hoy queremos mostrar otro de los aspectos a tener en cuenta y que nos crean mucha incertidumbre llegados los 65 años aproximadamente. Muchas personas se estancan pensando en el qué va a ser de su vida ahora, si lo que siempre ha hecho es trabajar. Por ello, nos gustaría resaltar que una persona en edad de jubilación todavía le quedan muchos años para "disfrutar o no" de su nueva situación de jubilado. Y de que va a depender de que se disfrute o no?, del grado de aceptación y adaptación de este nuevo rol en la vida de la persona, porque dependiendo de esto podrá desempeñar diferentes actividades y aprender a funcionar de diferente manera a la habitual, a lo conocido, para comenzar a abrirse a lo desconocido pero que puede ser muy enriquecedor.
Los cambios que le supone a una
persona la jubilación según Saéz y cols (1993), son la necesidad de adaptarse y
adoptar un nuevo rol, nuevas expectativas de comportamiento, reestructuración
de la vida familiar y social, pérdida de contactos sociales, disponibilidad de
mucho tiempo libre y la percepción de inutilidad y vejez.
Por otro lado, como afirman Saéz y
cols. (1993), la generalización en esta población es difícil ya que la
procedencia de cada uno en cuanto a historia personal, formación, estatus,
poder adquisitivo, rol, ...etc, es diferente. Y por consiguiente, el enfoque no
resultará el mismo. Por eso, aún con esas diferencias individuales todos
necesitamos información para poner en marcha estrategias con las que afrontar
esta nueva situación. A parte de los beneficios que se obtienen de la
adaptación. Como afirman diferentes autores la realización de actividades de
tipo solitario-activo o sociales (asistir a eventos, desempeñar voluntariado,
etc) tienen efectos positivos en la salud y disminuyen el riesgo de mortalidad
(Lennartsson y Silverstein (2001) y Sabin (1993)).
Planear la jubilación según Guevara
M.E (2012), juega un papel importante para poder disfrutar plenamente del
retiro. Hoy en día se llevan a cabo diferentes programas en distintos países
para que el individuo en proceso de jubilación se adapte mejor a este cambio o
proceso normativo. Según Bueno (2006),
hay que tener en cuenta y adaptarse a las características de las personas a las
que van dirigidos estos cursos, como la profesión, nivel cultural, etc.
Por todo esto, consideramos que es
muy importante realizar una buena planificación de la jubilación años antes de
que realmente llegue ese momento para gestionar de una forma más beneficiosa
este proceso de cambio y adaptación a un
nuevo rol.
Bibliografía
·
Guevara,
M.E (2012). Preparación para la jubilación: diseño de un programa de
acompañamiento psicológico. Visión
gerencial , 1, 103-122 .
·
Sáez,
N., Meléndez, J.C., Aleixandre, M. y De Vicente, P. (1993). Gerontología social. Perspectivas teóricas y
de intervención. Ed. diputación de Jaén. 167-220.
·
Bueno, B. y Buz, J. (2006). Jubilación y tiempo libre en la vejez.
Madrid, Informes Portal Mayores,
65. Lecciones de Gerontología.
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